Bogotá. El año pasado (cuando las grandes movilizaciones del paro nacional y las elecciones condujeron a que por primera vez los movimientos de izquierda llegaran a la presidencia de Colombia) fue el segundo más letal para los activistas sociales en las pasadas dos décadas, de acuerdo con el informe de junio de la organización Somos Defensores, que publica el sitio Verdad Abierta.